Calle de Canet

No hay calle más popular de Sarrià que el Carer Canet, un espacio de calma donde, de repente, desaparece el bullicio de la calle Major de Sarrià, a pocos metros, y dónde con solo pasear es posible transportarse al Sarrià, de dos siglos atrás.

Las doce casas bajas de la calle Canet son el elemento que otorga personalidad a esta vía urbanizada en el siglo XIX por Josep Bosch y Canet, quién construyó estas viviendas para los trabajadores de la finca agrícola de su familia.

Los Canet eran grandes terratenientes y fueron una de las familias más influyentes de la villa, sobre todo durante el siglo XVII, cuando formaron parte del gobierno de Sarrià. Su finca, Can Canet de la Vila – no confundir con Can Canet de la Riera, actual sede del Real Club de Tenis Barcelona - incluía grandes extensiones de terreno y daba trabajo a muchos trabajadores que atendían las diferentes tareas agrícolas y ganaderas que se requerían.

Estos trabajadores y sus familias vivían en estas casas de planta baja, primer piso, terraza y patio en la parte posterior, pero cuando la Masía fue demolida del conjunto rural del Hort de la Vila, muchos de ellos abandonaron sus viviendas y se trasladaron a otros lares buscando nuevas oportunidades de trabajo. Durante años, las casas fueron pasando de manos hasta convertirse definitivamente en propiedad del Ayuntamiento de Barcelona que las ha rehabilitado y cedido a entidades del barrio y pequeños artesanos, que han convierto a esta calle en el nuevo eje cívico de Sarrià.

Además de estas casas, destacar la imponente vivienda de la familia Sangrà, totalmente cubierta de buganvilias, que se erige en una de las esquinas de la calle Canet y que da la bienvenida a los visitantes con una gran puerta de hierro forjado y un escudo de armas esculpido en piedra.